La popular actriz y conductora televisiva Mirtha Legrand colgaría las arrugas y no volvería a sus tradicionales programas. Legrand, de 93 años, se habría visto muy afectada por las recientes muertes de sus hermanos, el director de cine José Martínez Suárez y la de ayer, de su gemela Silvia Goldie Legrand, su referente artística desde sus inicios y con quien brillara en el cine de los años '50. Mirtha sentiría que a su edad, ya no tiene a quién hacerle sentir envidia por lo bien que le sale su programa frente a una gemela que por no ostentar sus cirugías estéticas, era su Dorian Grey. La actriz se había alejado de las pantallas televisivas al declararse la pandemia, por integrar la población de riesgo, y su lugar fue cubierto por su nieta, Juana Viale, quien tal vez ahora se apropie de los ciclos de la longeva conductora. Así que adiós, Mirtha. El autoritarismo argentino, el mediopelo, pierde un valor inigualable en su lucha por la esclavitud y la exclusión de los que menos tienen.
