Todo felicidad: el equipo de científicos una vez concluída su labor. En algunos pueden apreciarse las huellas del arduo trabajo realizado. |
Un grupo de científicos marplatenses del Conicet de nuestra ciudad junto a la Universidad Nacional de Mar del Plata, en colaboración con una universidad española, desarrollaron un software que permite medir la movilidad de los espermatozoides. El dispositivo digital es un enorme logro de la ciencia argentina, tan desmerecida en estos tiempos, y fue realizado con mínimos recursos, como suelen llevar adelante sus proyectos los científicos nacionales.
El trabajo interdisciplinario fue realizado mediante la interacción de matemáticos, biólogos, ingenieros y veterinarios y sus resultados fueron publicados en la prestigiosa revista internacional Reproduction, que aborda estos temas.
El equipo, integrado por jóvenes profesionales de la ciencia debió esforzarse al máximo para desarrollar el SperMobility Tracker, un software que mide analizar cómo se mueven los espermatozoides y así hallar a los más vitales y con mayor posibilidad de engendrar.
Lamentablemente, los científicos varones del grupo sufrieron la peor parte, ya que debieron entregar diariamente y varias veces el vital elemento con el que se debía trabajar, y dos de ellos debieron ser internados en un par de ocasiones ante la extrema debilidad que debían soportar por el bien de la ciencia.
"Cada día se nos hacía más difícil aportar nuestra cuota de lechota para sostener la investigación", aseguró uno de los afectados, "No tenemos presupuesto para pagarle a donantes y la mayoría cobra mucho más ayudando a traer al mundo bebés como el de Marley", sostuvo.
"Tuvimos momentos muy difíciles, en los que tuvimos que detener la investigación porque alguno de los investigadores no lograba aportar el material", nos contó otro de los integrantes del equipo de trabajo "Todos esperando detrás de una puerta a que el científico lograra la eyaculación que permitiera continuar con nuestra investigación". Por suerte, las múltiples efusiones seminales dieron su resultado, y la Argentina tiene un nuevo motivo de orgullo.