Tal vez lo evite como al repudio a los nazis.
Además, sólo el 20% de los funcionarios de su equipo hicieron efectivo el cumplimiento de la norma: apenas trece de los integrantes de su gabinete. Son los que en la imagen se ven con una leyenda celeste junto a sus nombres. Ni siquiera los más notorios laderos de la gestión de Cambiemos, como el Secretario de Hacienda José Cano y el funcionario balneario Emiliano Giri han hecho constar sus bienes en la correspondiente página de la Municipalidad. Ni siquiera Vilma Baragiola -que tenía una absurda declaración jurada de los tiempos en que era concejal en la que declaraba una casa que luego enmendaba como de su madre- presentó al menos, ese mismo documento como para zafar. En la página del Honorable Concejo Deliberante pueden verse desprolijidades mayores: ausencia de fotos de los concejales nuevos, Arroyo que aún figura como concejal, varias declaraciones juradas faltantes y la de un concejal que dice no tener propiedad alguna a su nombre: ni casas, ni autos. Pero pese a eso, según el mismo concejal, el Banco Provincia le otorgó un crédito de 50 mil pesos, lo cual lo constituiría en el primer banco del mundo que le da un crédito a un indigente.
Por el lado de Cano, ya lo sabemos: no presentó su declaración jurada por culpa de Pulti, y procederá a denunciarlo.
Pero la resistencia de Arroyo a presentar su declaración jurada, aún luego de ganar las elecciones con consignas como "honestidad" y "transparencia", llama la atención. No sabemos con qué bienes contaba Arroyo al asumir, y por lo tanto no sabremos si se enriqueció en su gestión, ni podremos evaluar su honestidad y transparencia cuando deje el cargo. Es un dato de suma importancia, sobretodo cuando Cano sea el Secretario de Hacienda del próximo intendente y no pueda denunciar a Arroyo. Opacidad, desdén o tal vez, una estrategia.