Mientras aún
nada se sabe sobre lo que realmente ocurrió en
París, la comunidad internacional se solidariza con la capital francesa, que hoy ha sido víctima de feroces atentados cuyo número de víctimas aún se desconoce. Millones de argentinos expresan hacia
París la solidaridad que nos hace sentir pertenecientes a la comunidad internacional, algo imposible de reproducir con los diarios atentados en
Siria, Israel o
Líbano. La cancillería argentina ha dispuesto un rápido operativo para averiguar si entre las numerosas víctimas -al cierre de esta edición se habla de más de un centenar- hay argentinos. Si bien nuestra predilección viajera está más cercana al centro del Imperio, como
Miami, que a lugares en los que aún -y a veces- se intenta ejercer el pensamiento y la cultura, la capital gala es uno de los lugares que los argentinos eligen para visitar y luego volver a contarnos sobre cosas que los maravillaron en
París y que cualquiera puede conocer tras escrutar cualquier libro o internet. Rescatistas parisinos afirmaron que entre las víctimas habría personas que han tenido amigos cuyos parientes alguna vez estuvieron casados, o en pareja, o transaron o fueron vecinos de ferreteros que alguna vez creyeron conocer a algún argentino o uruguayo, según dijeron. Personal del consulado argentino busca entre las víctimas alguna señal de argentinidad que pudiera dar una pista, aún antes de que éstas pudieran someterse a las pericias pertinentes, y periodistas argentinos atosigan a las redacciones francesas que quisieran ocupar las líneas en enterarse sobre el hecho en sí, en busca de cadáveres aferrados a bandoneones, con tatuajes de
Maradona o el
Che, con camisetas número diez del
Barcelona o boletas de
Cambiemos. Sin embargo, la desprolija intervención de los paramédicos franceses, que prefieren salvar una vida antes de preguntar la nacionalidad a la víctima, ha impedido hasta el momento obtener información. Es de esperar que en las próximas horas podamos acceder a algún informe relevante al respecto.
