El sindicalista ferroviario
Rubén "El Pollo" Sobrero cruzó duramente al lider de los gastronómicos,
Luis Barrionuevo que en uno de sus habituales exabruptos expresó, durante el paro del martes pasado, que
"con los militares había diálogo y se podía negociar".
Sobrero calificó a
Barrionuevo de
"hijo de mil putas", y destacó que, a diferencia de lo que sostuvo el gastronómico,
"en la dictadura no había la libertad que hay hoy de chocar los trenes cuando se nos canta el orto". El dirigente afirmó que
"en aquellos años oscuros", si una persona como él viajaba en un tren,
"le tocaban el culo y le decían puto por su particular peinado y tintura" y que fuera del estado de derecho,
"jamás hubiera alcanzado el respeto y reconocimiento por ser un patotero sindical".
Sobrero dijo que a personajes como
Barrionuevo "hay que demostrarle con hechos" la falacia de sus declaraciones, y pronosticó
"una ola de choques de trenes, incendio de estaciones, heridos graves y piquetes virulentos durante el próximo paro general" para demostrarle al gastronómico que está equivocado.
