El presidente del tribunal del caso Marita Verón: "Actuamos en defensa de la única institución social básica a la que nuestros chicos, tras crecer en la represión de la Iglesia, la Policía corrupta, el Estado feudal y otras instituciones básicas, pueden ir a ponerla"

Justicia: el día que la pongan en lugar de las cruces,
tal vez cambien algunas cosas.

"Contrariado por las reacciones adversas al fallo", así dijo que se sentían los miembros de la Sala II de la Cámara Penal de Tucumán que absolvió a todos los acusados de secuestro y sometimiento a la prostitución en la persona de Marita Verón, el presidente del tribunal, Alberto Piedrabuena, que recibió a algunos medios en un intento de hacernos entender el fallo. De acuerdo a su parecer, el tribunal "actuó con rectitud", y que ante todo, la Justicia debe velar por la paz y tranquilidad de la sociedad en la que se desenvuelve "y a la que debe dar la cara día a día, cuando los flashes y las cámaras se hayan retirado". Agregó que "en todos los años en que llevamos manteniéndola impune, la actividad prostibularia nunca trajo mas problemas que cualquier otro ramo del comercio. De modo que no debe ser tan mala". En tal sentido, manifestó: "Hemos elegido actuar por encima de las personas, en defensa de la única institución social básica a la que nuestros chicos, que han crecido en la represión de la Iglesia, de la Policía corrupta, del Estado feudal y otras instituciones básicas de nuestra sociedad, y que tal vez no sean agraciados físicamente, aunque sí monetariamente, pueden ir a ponerla sin el riesgo de obtener un 'no' como respuesta de alguna chica confundida de su barrio, o un "si" de alguna mucama presta a embarazarse de alguna fortuna local;  y poder transformarse así, luego de los desvíos lógicos de la juventud, en hombres probos de esta sociedad, que luego intervienen activamente en la Iglesia, la Policía y el Estado feudal en defensa de los valores que siempre rigieron nuestra provincia y las provincias aledañas". Tras sostener que "mucho peor es que los chicos anden sueltos en la calle con la inseguridad que hay, y ser víctimas de los vendedores de droga", confió en que "el fallo puede ser polémico, pero no somos ingenuos y nos regimos por las mas estrictas normas del derecho. Así que tal vez mañana, 12 de diciembre se acabe el mundo por eso de los Mayas y todo esto quede en un malentendido mas." Piedrabuena advirtió acerca de los peligros que apelaciones y recusaciones pueden ocasionar al tribunal: "se corre el riesgo de colocar a la sociedad en antinomias malintencionadas, que la ponen en serio riesgo de dividirse y dejar de lado la paz que tantos delitos acallados nos costó conseguir", finalizó.