Cada vez mas constitucionalistas pagados por el Grupo Clarín descubren que lo que tenga que ocurrir el 7 de diciembre es "un atentado contra la libertad de expresión y el Estado de Derecho de insospechadas consecuencias"

Los observadores del mercado aseguran que han desaparecido de la plaza: nadie que precise discernir acerca de si su medianera está edificada en el lugar correcto, si una herencia debe repartirse en mas o menos partes, o aún si está bien votar a los 16 años logra encontrar en estos momentos un constitucionalista que pueda aconsejarlo. Todos han sido contratados por el Grupo Clarín para que observen si está bien o mal el proceso de desinversión en materia de medios que ordenó la Corte Suprema. Y parece que la estrategia viene dando resultados. Estos profesionales del derecho y la observación de las tablas de la ley, encuentran cada vez mas fallas en la misma y no sería raro que en conjunto presenten un proyecto para reformar la Constitución que tienda a adecuarla a los estatutos del grupo de medios, ya que son éstos la mas viva expresión de la libertad de prensa en el país y a través de los cuales la población toma conciencia de su realidad. "-Los esclarecedores sobres que me manda el Grupo Clarín son como el llamado de atención que me hace tomar conciencia de lo mal que estamos en materia constitucional-", nos asegura Daniel Sabsay, "-La Constitución es 'para todos los hombres de buena voluntad', y decir que Magnetto no tiene la mejor voluntad para con el pueblo cacerolero es al menos, prejuzgar-", afirmó el prestigioso letrado. "-Toda Constitución tiene que evitar el atropello de las mayorías y ponerse del lado del más débil-", nos advirtió Gregorio Badeni, "-y el más débil, sabemos todos, es Clarín, eso está claro-". Mientras que Félix Loñ advirtió que: "-Debemos encaminarnos hacia una Constitución que contemple las expresiones modernas sin tanta burocracia, que otorgue un rango legal a los caceroleros y la destitución express de funcionarios, empezando por el ciudadano que ejerza la primera magistratura. Si Alemania hubiera tenido un mecanismo así en la Segunda Guerra Mundial, hoy Hitler estaría vivito y coleando-" La nueva Constitución establecería en forma contundente la necesaria estratificación de la sociedad que permita que siempre haya pobres y sojuzgados sociales, "ya que la Argentina, desde sus albores, ha hecho una opción por la forma capitalista de gobierno" pero con la necesaria asistencia de los medios del grupo Clarín y otros monopolios locales para que la fe, el espíritu de superación y el ansia de entretenimiento no decaigan. "Es ahí donde el apoyo de los medios resulta vital para sostener a la sociedad", afirman los letrados.