Proponen posicionar a Mar del Plata como ciudad “Gente honesta friendly”

El concejal de Acción Marplatense y Presidente del Concejo Deliberante, Marcelo Artime, junto a concejales de diversos bloques políticos, presentó un proyecto donde plantea convocar a una Mesa de Trabajo a fin de elaborar e impulsar esta normativa.

“-De esta forma Mar del Plata se podrá posicionar como ciudad y destino turístico “Gente honesta friendly”, que puede generar un aumento del turismo nacional y extranjero, fortaleciendo los arribos durante los doce meses, y sobre todo en la captación de un nicho turístico exigente en cuanto a ética, lo que optimizará la oferta-” señaló Artime.

“-El hecho de que nosotros nos robemos hasta el diario del vecino, no significa que estemos cerrados a la presencia en la ciudad de personas realmente honestas que puedan dinamizar la economía y la calidad ciudadana local. En definitiva, no hay afano si no hay a quién afanar-", puntualizó.
“-Una vez instalado el tema debemos posicionarnos dentro de los lugares del mundo que defienden este espacio, empezar a figurar en las guías, e integrarnos al circuito regional e internacional. Al mismo tiempo, debemos promover políticas de inclusión del honesto marplatense, ya que no se debe discriminar a personas con esa elección moral-”, remarcó Artime.
En tal sentido, el proyecto contemplaría, incluso, la posibilidad de nombrar a alguna persona honesta al frente de una secretaría o subsecretaría del ejecutivo municipal. "-No hay porqué descartar que, en un futuro haya un "cupo de gente honesta" que integre las listas para la elección de concejales-", agregó.
La temática se encuentra comprendida en las políticas establecidas por el Instituto Nacional de Promoción Turística, dependiente del Ministerio de Turismo de la Nación.
La iniciativa Honest People friendly se ha extendido mundialmente y comprende la posibilidad de implementar derechos para personas honestas como también de políticas amigables con esta castigada comunidad en lugares de trabajo, escuelas y ámbitos públicos, junto al reconocimiento de la gente honesta como un grupo distintivo de ciudadanos con una diferente elección ética.
De aprobarse este proyecto, Mar del Plata estará a la vanguardia de las ciudades que, aún cagándose en ellos, acepten a las personas honestas como parte de su pujante comunidad.